- Hogar
- Gas

Gas
Encender un habano es el primer gesto que marca el tono de toda la fumada. Aunque puede parecer un detalle menor, el tipo de gas para habanos que se utiliza influye directamente en la pureza del sabor, el aroma y la integridad del tabaco. Como en todo arte, los elementos más pequeños muchas veces tienen el mayor impacto. Elegir el gas correcto no es solo una cuestión técnica, sino de respeto por el ritual.
-
- + 1
La importancia del gas de calidad para los habanos
Los conocedores lo saben: un encendido limpio y sin residuos es indispensable para disfrutar la complejidad aromática de un buen puro. Usar un gas para habanos refinado asegura una llama estable y sin olores que interfieran con las primeras caladas, que suelen ser las más reveladoras en cuanto a notas y carácter. Así, el encendido no solo enciende el tabaco, también despierta el momento.
Tipos de gas: ¿cuál es el más adecuado?
- Butano refinado: Es la opción preferida por los fumadores exigentes. Al ser inodoro y limpio, permite que el sabor del habano se mantenga puro. Su combustión estable evita alteraciones en la temperatura de encendido.
- Gas triple destilado: Ideal para encendedores de alto rendimiento. Reduce al mínimo la posibilidad de obstrucciones o residuos.
- Cartuchos presurizados con sistema antifugas: Aseguran seguridad y una carga precisa, sin alterar el funcionamiento interno del encendedor.
A diferencia de combustibles genéricos, estos gases especializados están pensados para proteger tanto al habano como al encendedor, dos piezas clave de una experiencia bien cuidada.
Los mejores que puedes tener
Los productos más recomendados por los aficionados suelen compartir tres características: alta pureza, estabilidad de llama y compatibilidad con encendedores de precisión. Entre los más valorados se encuentran:
- Cargas de butano premium con válvula universal, compatible con encendedores tipo soplete o de llama suave.
- Envases metálicos herméticos, que protegen el gas de la humedad y garantizan durabilidad.
- Marcas reconocidas por coleccionistas, con fórmulas desarrolladas para no dejar residuos internos.
La elección correcta también prolonga la vida útil del encendedor, evita acumulaciones y asegura que cada encendido sea preciso desde la primera chispa.
El cuidado que se pone al elegir un gas para habanos es el mismo que se dedica a escoger una buena vitola. No se trata de un accesorio más, sino de una pieza clave que acompaña el primer momento de disfrute. Al preparar tu habano, contar con un estuche de viaje adecuado y higrómetros confiables asegura que cada detalle esté bajo control. Encender un habano con el gas adecuado es dar inicio a un instante que merece ser perfecto.


